El Románico es el arte de la plena Edad Media y del
Feudalismo. El estilo artístico se adapta a
una sociedad ruralizada, inculta, controlada
intelectualmente por la Iglesia. Por eso va a ser el arte de
la irracionalidad, el oscurantismo y el misterio. Es un arte
relacionado con la fe, surgido de una
cultura teológica.
Existen una serie de
rasgos culturales que determinan el estilo. El sentido de este mundo y de
todos sus seres se encontraba en la religión. La teología es
a la vez Física, Astronomía, Filosofía, etc.
Todo lo humano está referido a lo divino. La Iglesia
coacciona el pensamiento libre y desconfía de los
individuos que se ponen a pensar por sí mismos y tratan de
ver las cosas con “la luz de la razón”. Una
luz más poderosa, la fe, lo iluminaba todo con suficiente
claridad. Así vemos como el dogma religioso
siempre produce irracionalidad y superstición, pero además produce la concepción de un mundo
autoritario, inmutable, eterno y dogmático; algo que estaba
muy bien así y no había porqué cambiarlo
2 Características generales del estilo románico
Hay que destacar que
la arquitectura es en el Románico lo más importante. La escultura y la
pintura no existen al margen de la religión y su lugar de
destino es siempre el templo, la iglesia o el
monasterio. La El estilo románico comulga perfectamente con
la naturaleza. Es un estilo de campo y las
pequeñas ermitas, las pequeñas iglesias o los monasterios se
localizan en lugares elegidos por su fácil
defensa (concepto de iglesia - fortaleza) pero también por su especial
belleza. escultura y la pintura se
supeditan a ornamentar el edifici El punto de arranque del nuevo estilo es el
monasterio de Cluny. La donación del duque de
Aquitania Guillermo III en el 909 permite que el abad Brumón
funde en la villa de Cluny en Borgoña
un monasterio con doce monjes. Allí se elaboró una reforma,
la cluniaciense, basada en la adoración
por todos los fieles de las reliquias de santos y que sólo
podían poseer los monjes. Esta reforma supuso o románico. c) Al difundir la
costumbre de venerar las reliquias de
los santos se instauraron las
peregrinaciones mediante las cuales se unificó la cultura y
el arte europeos. Esas fueron las primeras
vías de contacto entre diferentes pueblos y por ellas se
difundió el nuevo estilo románico. Por eso se le
ha definido también como “el arte de los viajeros”, el arte
de los caminos de peregrinación y, en
España esto es más cierto todavía. Se crearon tres vías de
peregrinación en Europa:
· Los santos lugares,
ruta devota y guerrera a partir del siglo XII con las cruzadas
· El Mont Saint
Michel en la Bretaña francesa
· El camino de
Santiago, la más importante y la culminación de todo peregrino.
La ruta jacobea
cruzaba Alemania, Países Bajos y Francia antes de entrar a la Península por
Somport en Jaca o por Roncesvalles en Navarra. Esos dos
ramales se unían en Nájera-Logroño y ya
viajaba por Burgos, León, Orense hasta llegar a Santiago de
Compostela. Mientras que en Francia o alia el Románico se lleva a cabo a partir de monasterios ya
existentes, reformándolos, en la Península Ibérica la ruta de
peregrinación atraviesa
“tierra de nadie” recién reconquistada a
los musulmanes aún no repoblada. Por este camino entra la
reforma
cluniaciense convirtiendo esta zona en un auténtico tubo de
ensayo
para el hallazgo de nuevas soluciones artísticas a) En la
sociedad oscurantista y esotérica del siglo X había una auténtica psicosis de
milenarismo o cambio de milenio, el cual se asociaba con el
fin del mundo (como hoy en día). Pero al
pasar el milenio y ver que no ocurría nada especial, en
acción de gracias Occidente se llenó de
santuarios. Hubo un sentimiento de gratitud y devoción y de
esto se aprovecharon los monjes
cluniacienses porque con la adoración de las reliquias ellos
obtenían suculentos beneficios (caridad,
hospedaje, ofrendas, etc). Era una manera de autofinanciar
el monasterio a) En la sociedad oscurantista y esotérica del siglo X había una
auténtica psicosis de
milenarismo o cambio de milenio, el cual se asociaba con el
fin del mundo (como hoy en día). Pero al
pasar el milenio y ver que no ocurría nada especial, en
acción de gracias Occidente se llenó de
santuarios. Hubo un sentimiento de gratitud y devoción y de
esto se aprovecharon los monjes
cluniacienses porque con la adoración de las reliquias ellos
obtenían suculentos beneficios (caridad,
hospedaje, ofrendas, etc). Era una manera de autofinanciar
el monasteri b) Con la reforma cluniaciense los monasterios multiplicaron las
donaciones, comenzaron así a
extenderse por toda Europa y consiguieron sufragar los
cuantiosos gastos que requerían las nuevas
construcciones. Los mismos monjes eran los arquitectos y
fueron ellos mismos, los monjes de Cluny,
los que esparcieron el estilo románico por varias rutas relacionadas con las
reliquias: las vías do 4 La arquitectura
románica El Templo Románico (1) es el monumento principal de la arquitectura
románica. Su planta suele ser de cruz latina, con una o
varias naves
longitudinales: 1-3-5 y otra transversal o crucero. También
hay templos con
planta de cruz griega y templos centralizados (baptisterios
o iglesias octogonales
de templarios). Las cabeceras de las plantas longitudinales
terminan en ábsides, normalmente
semicirculares, aunque el de la nave central suele ser mayor
que los laterales. A veces se adosan ábsides secundarios sobre los brazos del
crucero o radiales sobre la girola o
deambulatorio, nave
semicircular que rodea el ábside central por detrás.
La nave central es
más alta que las laterales lo que produce
al exterior un efecto volumétrico variado. El templo
románico se
resuelve en un juego de volúmenes geométricos. Los muros
sobresalientes de la nave central se perforan por una banda
de
ventanas que contribuyen a la iluminación del interior
(esquema
típico de la planta basilical). Las naves laterales tienen
en las grandes iglesias, dos pisos para
contrarrestar los empujes laterales de la nave central. Este
segundo piso hace la función de tribuna y
tiene vanos abiertos a la nave central. Este conjunto de
vanos de la tribuna se llama triforio y pasará
más esquematizado al Gótico.
En el lugar donde la
nave central se cruza con la transversal
suele levantarse una bóveda semiesférica sobre trompas o una
cúpula sobre pechinas. Esta bóveda central cubre el cuadrado
del
crucero y sobresale al exterior con una torre que se
denomina
cimborrio, algunas veces rematada por una linterna para
ganar altura e iluminación interior.
Otra innovación del
Románico es la incorporación del campanario al
cuerpo de la iglesia. En el arte bizantino y prerrománico
estaba separado.
Ahora se suelen adosar dos campanarios a los pies del
templo. Otras veces se
aumenta la altura del cimborrio y se convierte en torre
campanario y, en las
iglesias pequeñas, se adosan posteriormente espadañas sobre las fachadas.
También a los pies de la nave central suele situarse una
pequeña nave
transversal a manera de vestíbulo. Si queda incluido dentro
de la planta del
edificio se llama Nartex y si sobresale de la anchura
general se llama Atrio.
Una variedad del
templo románico es el templo claustral o
monasterio, el cual se organiza en torno a un patio central
que está
rodeado por un corredor cubierto o claustro (2) sostenido
por arcos
y columnas. Esta obra es donde el Románico presenta sus
mejores
características arquitectónicas y escultóricas. Sobre los muros del claustro se
abren todas las
dependencias del monasterio: iglesia, refectorio, sala
capitular, sacristía, cocina, biblioteca, celdas, etc.
Cuando las dependencias del claustro son muy numerosas el
claustro se hace de dos pisos.